El equipo de enfermería de Clínica Nida: nuestra primera línea.

Acudir por primera vez a una clínica de fertilidad supone mucha incertidumbre.

El equipo de Enfermería de Nida es el primer contacto de los pacientes con la clínica, y ellas son las primeras en apreciar ese nerviosismo, ese miedo a lo desconocido que muchas veces sienten y que tratan de atajar mediante explicaciones, comprensión y mucho cariño. 

¿Pero por qué es tan importante su figura dentro de clínica Nida? Porque además de ser fundamentales en el desarrollo del trabajo diario, son el nexo de unión del paciente con el resto de los profesionales de la clínica.

Porque ellas apoyan y cuidan de cada uno de los pacientes durante el proceso, trasmitiéndoles que están respaldados por personas a las que les importan y sobre todo, que van a conseguir su objetivo. Disipar ese miedo inicial (pero que muchas veces se instala a lo largo del proceso) es algo fundamental para el equipo de enfermería

Porque son las responsables de la citación y de las analíticas, asisten en quirófano las intervenciones del equipo médico y apoyan la labor del equipo de biólogos. Además, supervisan toda la fase de recuperación tras la intervención quirúrgica y ponen toda su profesionalidad y empatía a disposición de los pacientes.

Porque coordinan el programa de donantes de ovocitos y supervisan, junto al equipo médico, el complejo proceso que supone una recepción de ovocitos.

Porque instruyen a los pacientes sobre la preparación y administración de la medicación, explicando el protocolo las veces que haga falta.

Y es que al final de todo, como el resto del equipo de Nida, sólo tienen un objetivo: que cada paciente se sienta lo mejor posible en nuestra clínica, sabiendo que cuentan con ellas cuando lo necesiten. Antes, durante y después.