Tratamientos de fertilidad, embarazos y Covid 19.

16 de septiembre de 2020

Nos encontramos en medio de una pandemia mundial, pero el deseo de ser padres no desaparece. ¿Deberíamos dejar este sueño de lado o retrasarlo durante un tiempo?

¿Qué debemos recomendar a nuestras pacientes?.

Está claro que a nuestras pacientes les ha tocado vivir una época compleja desde el punto de vista de la seguridad si desean una gestación y más si para ello tienen que recurrir a un tratamiento de fertilidad.

También es cierto que la fertilidad de la mujer tiene una connotación temporal trascendental y el retraso en los tratamientos puede reducir de forma importante las posibilidades de éxito de conseguir un embarazo con óvulos propios. A partir de los 35 años el porcentaje de óvulos cromosómicamente normales es menor del 50% y cada año que pasa la reducción de este porcentaje es mayor. Si a eso le unimos una reserva ovárica reducida que ya tienen muchas pacientes, y que también disminuye con la edad, las probabilidades de conseguir un embarazo cada año se van reduciendo más y el número de óvulos necesario para ello va aumentando.

En las fases iniciales de la pandemia la incertidumbre hizo que se suspendieran temporalmente los tratamientos de fertilidad aunque la OMS en ningún momento recomendó evitar la gestación.

Después de unos meses fueron apareciendo publicaciones tanto sobre el riesgo de transmisión de la infección en secreciones genitales así como en un laboratorio de reproducción y también sobre los riesgos en la gestación.

Por otro lado, con el conocimiento actual parece improbable que los espermatozoides, ovocitos y embriones se infecten por el coronavirus SARS-COV-2. A pesar de ello, todos los laboratorios de Reproducción Asistida deben disponer de protocolos para prevenir un posible contagio entre embriólogos y pacientes y para evitar la contaminación de sus muestras.

Aun así se contraindica o suspende el tratamiento de cualquier paciente potencialmente infectado o infectada y antes de cualquier técnica de reproducción, se confirma que los progenitores de los gametos son negativos para COVID-19 mediante PCR.

Con todo ello tanto la Sociedad Española de Fertilidad como la Asociación para el Estudio de la Biología de la Reproducción recomiendan realizar los tratamientos de fertilidad siempre que estén indicados clínicamente implementando las medidas de seguridad adecuadas para minimizar riesgos de contagio.

Parece claro que este virus ha venido para quedarse y tenemos que aprender a convivir con él. Y eso es lo que estamos haciendo en Clínica Nida, cumpliendo todos los protocolos de seguridad a nivel clínico y de laboratorio en nuestros tratamientos, y manteniéndonos a tu lado para ayudarte y asesorarte en todo aquello que necesites.

Clínica NIDA.