La primera consulta de nuestra clínica de fertilidad dura aproximadamente una hora. A lo largo de la misma, el médico iniciará la entrevista conociendo y estudiando tu historia clínica de forma rigurosa, para conocer tus antecedentes familiares y personales detalladamente. Procederemos con una exploración ginecológica y una ecografía para detectar y estudiar posibles factores relacionados con el problema de esterilidad. Si se han realizado algún tipo de pruebas, es recomendable que se aporten el mismo día, ya que pueden ayudar al médico a solicitar pruebas complementarias que pudieran ser necesarias y tener más información sobre el caso. SI no es así, os indicaremos que tipo de estudio es el recomendable para realizarlo en vuestro caso.
En la misma consulta orientaremos la necesidad o no de un tratamiento y de cual estaría indicado en cada caso.
Se habla de esterilidad en aquella pareja en la que no ha existido ningún embarazo tras un año de relaciones sexuales frecuentes y sin métodos anticonceptivos.
El término infertilidad hace referencia a aquellas parejas las cuales consiguen gestación pero no alcanzan el parto.
En parejas normales, con deseo de descendencia, el 75-80% consiguen la gestación tras un año de relaciones sexuales frecuentes y sin uso de métodos anticonceptivos. Si una pareja en 12 meses no ha conseguido el embarazo y no es consciente de padecer ningún tipo de problema (médico o psicológico) que dificulte la descendencia, debería buscar ayuda médica.
Como la esterilidad es un problema de pareja, ambos deben hacer un estudio diagnóstico.
Existen determinadas situaciones en las que se recomienda adelantar el estudio si a los 6 meses no se ha conseguido el embarazo, éstas son:
- Pacientes con sospecha de endometriosis
- Pacientes con ciclos menstruales irregulares
- Sospecha de infecciones genitales
- Pacientes con enfermedades orgánicas.
- Pacientes con cirugías ováricas o uterinas previas.
- Pacientes mayores de 35 años.
- Varones que hayan sufrido algún tipo de enfermedad que condicione la fertilidad
- Varones cuya actividad laboral esté relacionada con uso de materiales o sustancias tóxicas.
- Procedimientos quirúrgicos previos como vasectomía o ligadura tubárica.
- Trastornos de la libido o la erección.
Un mioma es un tumor benigno uterino formado por células musculares. Se estima que por encima de los 30 años, un 30% de las mujeres los presenten. La mitad de ellos no producen síntomas, y en caso de producirlos, los más frecuentes son los sangrados menstruales abundantes.
La mayoría de las pacientes con miomas son fértiles y asintomáticas (no presentan síntomas), por lo que de inicio no es necesario pensar que la reproducción se vea comprometida. Existen algunas excepciones a esta afirmación, y es en aquellas miomas cuyo crecimiento es hacia el interior del útero (miomas submucosos) o aquellos de un gran tamaño o rápido crecimiento.
Es posible que el médico recomiende en algunos casos la realización de una histeroscopia para evaluar la estructura de la cavidad uterina en algunas pacientes con miomas.
En cualquier caso, se debe individualizar cada caso de los pacientes.
La endometriosis es una enfermedad ginecológica que consiste en la implantación de tejido semejante al endometrio en lugares anómalos como sin la superficie peritoneal u órganos pélvicos.
Su incidencia se estima en el 10-15%, aunque es más frecuente en las pacientes infértiles (25%).
Sus síntomas pueden producir dismenorrea severa (dolor intenso durante las reglas), dolor con las relaciones sexuales, etc.
El tratamiento debe ser individualizado, tomando en cuenta el problema clínico, que incluye el impacto sobre la fertilidad y la calidad de vida.
Se trata de un procedimiento quirúrgico ginecológico que consiste en la introducción de una pequeña óptica de 3-4mm de calibre a través de vía vaginal y cérvix uterino para la exploración directa del interior del útero. Se utiliza para la evaluación de la cavidad uterina, así como para la eliminación de pólipos, tabiques vaginales, adherencias y miomas submucosos.
Se trata de un procedimiento quirúrgico que consiste en la exploración o examen de la cavidad abdominal mediante la introducción de un laparoscopio a través de una pequeña incisión abdominal. Con la cámara se pueden observar los órganos genitales interior situados en la pelvis, así como otros órganos intraabdominales (intestino, vejiga…). Se utiliza para la eliminación de quistes de ovario, endometriomas, miomas, adherencias, etc.
Se trata de una técnica de reproducción asistida que consiste en depositar los espermatozoides en el útero de la mujer en su periodo ovulatorio con el objetivo de lograr la gestación.
En los ciclos de estimulación hormonal, las pacientes acuden a realizar controles ecográficos analíticas para verificar y comprobar la evolución del crecimiento folicular y hormonal en el contexto de los tratamientos de reproducción asistida.
La ley española de Reproducción Asistida autoriza la transferencia de un máximo de tres embriones en un ciclo.
En el caso de la clínica NIDA siempre os recomendaremos en caso de permitírnoslo el tratamiento, la transferencia de un único embrión, dado que los objetivos de las técnicas de reproducción asistida es el dar lugar a un bebé sano y una madre sana en casa y los embarazos múltiples siempre se relacionan con mayores tasas de complicaciones materno-fetales. En cualquier caso, dentro del tratamiento y en función de la calidad embrionaria os iremos asesorando en este tema.
Si. En NIDA creemos que todas las mujeres y parejas deben poder acceder a los tratamientos que necesiten, en el momento que ellos decidan. Por eso contamos con un sistema de financiación para aquellos pacientes que lo necesiten.